domingo, agosto 24, 2008

A la orilla del Tajo

Seguro que en vuestros recorridos habituales hay algún sitio de paso muy especial en el que nunca os habéis llegado a detener, pero cada vez que pasáis por allí pensáis: "Un día de estos me paro y lo disfruto". Pues eso hicimos con Toth el pasado puente de Agosto, al pasar junto al Tajo de camino a la Alcarria.
El tío se lo pasó en grande, se restregó por el suelo y se frotó con los juncos del borde.


Como no nos dio tiempo a quitarle la correa del cuello, la mojó y le destiñó toda la cara y el cuellazo. Así que lo sacamos de allí que parecía que le había dado el sarampión y llevaba la cabeza teñida de rojo por algunas zonas. Pero... ¿y lo bien que se lo pasó? Si yo fuera perro creo que también me daría igual de qué color se me queda la cara, lo importante era frotarse entero con el frescor del Tajo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya, asi que a este tambien le gusta el agua eh... esta semana que he estado solita con otto le he estado bajando todas las semanas al parque de txurdinada y con muy buena suerte hemos tenido solazo todos los dias. y como no, el fuente que veia fuente en la que se metia. tal vez sea por todo el pelo que tiene o porque le encanta, pero la cuestion es que lo hace. ya veo que no es el unico que seria capaz de arrastras a alguien por meterse en el agua jejeje.

se que es un pokito largo, pero os fastidiais!!!! jejejeje muxutxus de una loka de los Bilbos.
muakxxxxx